En mis viajes por aquellos otros mundos
alguna que otra vez tuve que aprender oficios
con los cuales ganarme la paella y la botella-vino
amen de todas esas cosas que hacen, de la vida, agradable estancia
Estos son algunos de tales curritos y los lugares
en que acaecieron
Fechas, imposible recordar; siempre salgo disparado
sin saber donde acabar ni cuando llegar:
Si sabes el final, aburrido es dar con él
Aprendí el oficio de Ciego en el Pais de los Mancos
Era un sitio en donde privaban hasta las manquesinas de los endificios
Por cierto: nunca llegué a ver la paga. Pero tampoco importó
En IndiaNápoles, aprendí el duro arte del Comedor de Cortinas
Había que elegir muy bien el tipo de cortinamiento que encajaba
en el ambiente de sus tan famosas y preMeditadas carreras antes-de-morir
El famoso dicho popular lo dice claro: "ver IndiaNápoles es pa dejal de viví"
Y algunas, conste, eran realmente indigestas, aunque siempre en fiestas
Aquello, realmente resultaba mística experiencia y
formábamos parte de la Casta de los Castañazos
En las carreras, ya se sabe
En Mahou-ritania, país del culto a Lup Ulo, acabé dominando
no sin serios disgustos, el traicionero y doloroso oficio del Domador de Cremalleras
Sin embargo, y aún siendo exigido como requisito indispensable en sus fronteras
-conseguí colarme como sin-cascos (un equivalente a sin-papeles)-
pronto llegué a dominarlo pues, no era por pagar el pato, no,
sino el pito quien acababa pagando, tanto lúp-ulo en el cuerpo
Como era un asunto tipo negro, estaba muy bien pagado
en dinero de chapadillo
Tambien de estrangis, hice de "elfo" en innumerable cantidad de novelas
jamás editadas.
Qué digo editadas!: Ni siquiera escritas, creo
Aquí, lo normal fue que la paga siempre resultó ficticia
Además, había mucha pluma de por medio, cosa que no mola en absoluto
...Lástima de elfas..., tambien mentales, claro.
Pero imagina el cosquilleo con semejante oreja
En el pais conocido como Renault, esas tierras del sur con tanto volante
en donde las novelas no están en boga, sino que van en buga
... y con sombrero cordobés...
estuve haciendo papeles de gato embotao
Y es que ya se sabe: mejor de gato en casa con buga
que sin buga en casa con gato, (o buga sin casa ni gato)
esto es, más bien, metafórico,
metacrilato, o simplemente
matarile. El tiempo decidirá
Diría que es por eso lo del "embotao"; y nunca tuve claro si
teníamos derecho a sueldo o no, tan embotaos tábamos tóos
En Aptenas, hace atpenas unos años, había muchas aptenienses
Casi todas se aptenían de dirigirte la palabra
Pero tan guäp-papas eran que, ipnevitable era dejar de mirarlas
El Discówollo era una espepcie de título honorípfico
para cuando conseguías mirar a depterminada cantidad de ellas a lap vez
-el apsunto ese de darle vueltas al apsunto,
aunque,en este caso fuese apsunta, que no Serna -o sarna, pongamos por caso
Era una pena pues tenía sus desventajas: acababan saliendo erp-es en os-obakis
Recuerden a Herpes Trimegisto, su inventor
El currete de Saludante Impelial me salíó de chiripa
Fue una casualidad (aunque descaradamente miento)
que no lo buscara en aquel lugarejo tan cerrado:
Chinasvinto -y si tenvinto Nimacueldo, chin!
De la que me libré. A veces salen curros...
Aquí, con el embajador... o era embaujcador?
... Cosas del idioma
En Léxico Mindo, y aunque no llegué a graduarme,
pasé un cierto tiempo intentando comprender el conocido
y tan difundido arte del Toreador
Basicamente, consiste en volver majara a tu interlocutor
por medio de artimañas verbales con las que confundir al oponente
haciendole creer que lo que, en un principio defendía
es lo que en realidad odia, para inútil regocijo del titulado toreador
Ni con esas, eh!
Y ya ven que ¡hasta traje adquirí!
Escapao salí
Por cierto: este lugar y el anterior estan muy,
pero que muy cercanos en el tiempo del espacio
en el espacio del tiempo y, por suerte,
el tiempo no pasó d-espacio
No hay comentarios:
Publicar un comentario